18/10/2024 La Nación - Nota - Política - Pag. 15

Con críticas a Cristina, Villarruel reivindicó a Isabel Perón en el Senado
Gustavo Ybarra LA NACION
homenaje. Inauguró un busto en el Día de la Lealtad, una fecha peronista, y mostró imágenes de una reciente reunión en España

En un claro tiro por elevación a Cristina Kirchner, la vicepresidenta Victoria Villarruel aprovechó la celebración del Día de la Lealtad -una festividad peronista- para reivindicar la figura de María Estela Martínez de Perón, a quien le tributó un homenaje como "primera vicepresidente de esta casa y primera mujer presidente constitucional de nuestra república y del mundo", con la instalación de un busto de la exjefa del Estado en el Salón de las Provincias del Senado.
"En un día en el que se habla de lealtad, quisiera saber dónde están aquellas personas que dejaron a una mujer cuyo apellido es Perón a merced del terrorismo al que combatió, por el gobierno de facto que la encarceló y, finalmente, por una clase política que la desterró", sentenció Villarruel en un breve discurso de menos de cinco minutos que ofreció en el acto en el que descubrió el busto de la viuda de Juan Domingo Perón, quien a los 93 años reside en España.
La entronización de la estatua de Isabel se intentó mantener en secreto, pero el misterio se diluyó poco más de una hora antes del acto en el Senado cuando subió a sus redes sociales una serie de fotos que se tomó con "Isabelita" el jueves de la semana pasada, durante su reciente viaje a España, cuando fue recibida en la casa que la exmandataria habita en las afueras de Madrid.
Además de negarle la condición de primera presidenta elegida que muchas veces se adjudicó Cristina Kirchner, la actual vicepresidenta lanzó críticas a su antecesora, aunque sin mencionarla. Así, tras destacar que Isabel Perón "nunca pidió venganza ni criticó a los cobardes que la habían perjudicado", la vicepresidenta sentenció: "Qué diferencia con los políticos actuales, ¿no? Por muchísimo menos los vemos victimizándose sin conocer lo que es afrontar el peligro, el destierro, ni mucho menos la prisión. Ya tienen el hábito miserable del llanto y de la indignación selectiva".
Según contó la vicepresidenta en su discurso, el busto instalado en el Salón de las Provincias perteneció al músico Ricardo lorio, líder del grupo de rock pesado Almafuer- te, que falleció el año pasado y era reconocido por su prédica nacionalista.
"Hoy [por ayer] se termina la proscripción de Isabel Perón, impuesta por los mismos que ahora dirigen el partido político que lleva su mismo apellido y que ha corroído las bases estructurales de nuestra gran nación, desoyendo las ideas que alimentaron la doctrina justi- cialista", volvió a la carga contra el kirchnerismo. "Termina el silencio cómplice y se alza el grito estridente de lo que siempre ha debido ser: que Isabel Martínez de Perón, no Isabelita, vuelve a tener la voz que nunca debieron de quitarle, remató.
La reunión en España Según confiaron allegados a la vicepresidenta, la reunión con la expresidenta fue acordada antes de que Villarruel partiera a la gira de diez días que realizó por Europa, que concluyó el lunes en el Vaticano con una audiencia con el papa Francisco.
Allí se juntó con el Sumo Pontífice tan solo unas semanas después de que hablara de un caso de corrupción y criticara el accionar de las fuerzas de seguridad en las protestas frente al Congreso por el veto al aumento de las jubilaciones. La reunión con Isabel Perón muestra otra arista de esa separación entre Villarruel y el mandatario, principalmente al mencionarla como la "primera presidente mujer del mundo y de la Argentina constitucionalmente elegida". También le otorgó un reconocimiento como vicepresidente y presidente de la cámara por parte del Senado.
Villarruel compartió también en redes sociales un video que recopila el paso de la viuda de Perón por la vicepresidencia y presidencia de la Nación y se ve cómo fue derrocada por las Fuerzas Armadas el 24 de marzo de 1976. En el video se remarca: "Su figura fue borrada de la memoria oficial durante décadas, mientras los mismos que hoy se dicen herederos de una tradición política intentaron ocultar su legado".
Isabel Perón vive en un chalet de tres plantas, en un barrio semice- rrado, en Villanueva de la Cañada, a 45 kilómetros del centro de Madrid. Allí recibió a Villarruel, en una de las contadísimas reuniones de carácter político que ha tenido desde su retiro. Casi no sale a la calle, salvo para atenderse con sus médicos.
No písala Argentina desde 1994, cuando Carlos Menem la invitó por última vez. Nunca más volvió a sugerir la idea de radicarse otra vez en el país del que partió al exilio en 1981, después de cinco años de encierro que le impuso la dictadura. Siente fobia por la política, cuentan en su entorno. Casi no le quedan vínculos con el país en que nació hace 93 años y que le tocó gobernar entre el 1° de julio de 1974 y el 24 de marzo de 1976. Todos sus hermanos han fallecido ya.*


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